Último partido del grupo B para decidir el primer puesto que proporciona pase directo a cuartos. Ambos equipos llegan con 9 puntos y un campeonato perfecto para los dos.

El partido comienza tácticamente muy bien trabajado por ambos entrenadores. El Parquesol con un esquema 2-3-1 dejando un sólo jugador como organizador en el centro del campo. Sin embargo el Oroso apuesta por un sistema más cerrado con un 3-2-1, dejando pista libre a los laterales y adueñándose del mediocampo con dos pivotes de nivel.

La superioridad del Oroso en la zona de creación junto con el gran talento de César Gontan (DªNº 19) y Javier Domínguez (DªNº 21) contrarresta con eficacia el poder físico y la fortaleza de los jugadores del Parquesol.

Tras un pequeño tú a tú entre ambos equipos en los que cada uno intentaba hacer valer sus habilidades, una jugada a balón parado decanta el marcador hacia el lado del Parquesol, gracias a un espléndido disparo del Aleksandar Isailovic (DªNº 12), bajo la atenta, y orgullosa, mirada de su padre desde la grada (ex-jugador del Valladolid).

Con el resultado a su favor el Parquesol retrasa sus líneas y renuncia a salir con el balón jugado por medio de sus centrales, lo que provoca balones al aire y disputas continuas por la posesión en el medio campo. Debido a esto el Oroso se hace dueño del esférico y a su vez del partido.

El incesante ataque del Oroso lleva sus frutos cuando el colegiado del encuentro señala un penalty a favor del Oroso. Pero el lanzamiento no ve puerta.

Al no conseguir meter gol, a pesar de seguir atacando, el entrenador del Oroso decide realizar un cambio y da entrada en el terreno de juego al DªNº 14 Óscar Remuiñan, un jugador con una técnica no propia de su edad y con un criterio asociativo digno de un crack; su juego contagia a César Gontan y Javier Domínguez; creando un triplete atacante que sería la pesadilla de la defensa del Parquesol. El ataque de este trio de jugadores muy pronto daría sus frutos y llega el empate del equipo coruñés.

Tras el saque de centro, el poderío físico del Parquesol se demuestra en una jugada inmediata que vuelve a adelantar al equipo vallisoletano en el marcador.

El partido continuó con el dominio por parte del Oroso y el repliegue del Parquesol para mantener el resultado y consolidar el liderato de su grupo; pero el gran toque de balón y la posesión por parte del Oroso dio sus frutos en una jugada por la banda que terminó con el balón en las redes de la portería del Parquesol.

Un resultado final de 2-2 y un espléndido espectáculo son las definiciones claras de un partido que podríamos denominar, sin duda a equivocarnos, al mejor partido del torneo hasta el momento.

Crónica por Miguel Rios